Casi todas las personas que han decidido hacerse veganas han pasado por un fase de enojo. Y, en gran medida, esta es una reacción natural ante el descomunal sufrimiento de los animales. Pero, ¿cómo podemos seguir siendo veganos y con una buena actitud en un sistema que todavía te dice que comas carne?

Primero que nada, hablemos de dónde viene ese enojo.

La mayoría de los veganos (personas que han decidido seguir una alimentación basada en plantas) nos hemos sentido muy molestos en algún momento ante la realidad que viven los animales en la industria cárnica, y tenemos contundentes razones para estarlo. 

Tenemos razones para sentirnos enojados con una industria que ha convertido a animales conscientes y sensibles en máquinas de producción y por la indiferencia de algunas personas ante el hecho de que billones de ellos no conocen un minuto de alivio y paz en todas sus vidas y que esta sea una realidad que, increíblemente, muchas personas todavía desconocen.

Por que sí, lo que experimentan los animales que la industria hace nacer para someterlos a las mayor violencia jamás conocida es de lo más injusto que pueda existir en el mundo. No sentirse indignado ante esto y rechazarlo sería más bien una falta absoluta de compasión y empatía, es decir, más bien algo sobre lo cual preocuparse.

La culpa, no te la tomes tan a pecho

Reconocer que alguna vez contribuiste al dolor y sufrimiento de seres sensibles que al igual que tu y yo conscientemente no quieren morir es un trago amargo muy difícil de pasar. Todos estuvimos allí, así que no seas duro contigo mismo y reconcíliate con ese hecho

Luego de todo este proceso que involucra emociones tan naturales en quienes queremos que esta crueldad acabe, en algún punto de nuestra vida tenemos que dejar ir todo ese dolor para poder convertirnos en agentes de cambio.

Es tanto lo que sufren y soportan los animales y tan duro de ver el infierno en el que viven, que si sumado a esto nos mantenemos con una actitud intolerante y lo comunicamos a otras personas con irritabilidad o enojo estaríamos en realidad perjudicando a los animales. Porque el enojo provoca rechazo y así estaríamos alejando a las personas que el día de mañana podrían cambiar su percepción y comenzar a cambiar para ayudar a los animales.

Todos nosotros en algún momento también ignoramos esta realidad y ahora nos parece increíble que en algún momento comíamos animales. ¿No habrías acaso preferido que si en ese momento alguna persona te hablara sobre el tema lo hiciera con comprensión y paciencia? 

Necesitamos abrir corazones y esto solo es posible desde el respeto y la tolerancia.

Somos los embajadores de los animales

Atrapados como están dentro de la perversa industria, los animales no tienen posibilidad de escapar. Nosotros somos la única esperanza que tienen para que su sufrimiento no quede silenciado detrás de la engañosa publicidad que nos quieren vender. 

También somos la única voz con la que cuentan, por eso es que aunque es urgente que nos sumemos a denunciar estas atrocidades es vital que lo hagamos en una forma que beneficie a los animales.

¿Cómo lo hacemos? Confío en que estos 5 consejos te abran el camino hacia una actitud que no solo ayudará mucho a los animales sino que te hará sentir muy bien.

 1. Colabora con alguna organización que proteja a los animales

Ellos conocen cómo comunicar la problemática de los animales y puedes aprender mucho además de apoyar sus acciones y campañas para poner fin a la crueldad animal. Igualdad Animal está llevando adelante en México cambios en nuestra legislación sin precedentes para los animales destinados a consumo. Conócelos aquí. 

2. Habla con otros veganos

Estar en contacto con otras personas que tienen tus mismas preocupaciones e intereses no solo es muy estimulante y positivo sino que puedes compartir con ellos cómo te sientes y lograr un intercambio muy enriquecedor para todos. 

3. Recuerda que tomaste una decisión importante y de altísimo impacto

Aunque puede que encuentres oposición y objeciones en tu entorno también encontrarás apoyo por tu decisión. No olvides que al decidir seguir una alimentación basada en plantas estas evitando el sufrimiento y muerte de los animales ya que cada hora son matados 192 millones y la mayoría de ellos antes del primer mes de edad. También estarás consumiendo 17 veces menos tierra, 14 veces menos agua y 10 veces menos energía que una persona que come carne.

4. Lee, mira, aprende y difunde

Ya sea que te encuentres empezando y lidiando con una gran cantidad de emociones o no, lo cierto es que las preguntas sobre ser vegano no dejarán de saltar en cualquier reunión, aula de clases o en tu trabajo. Si conoces cada vez más sobre el tema vas a poder informar mejor a otros y podrás comunicarlo mejor.

 5. Sé el cambio que quieres ver en el mundo

Ya habrás escuchado antes que la mejor forma de demostrar algo es hacerlo. Así que habla y vive siempre en consonancia con tus valores sobre el respeto hacia los animales. 

Si consumes alimentos y productos de origen vegetal, cuando los cocines y los uses las personas lo notarán. Tu salud mejorará y esto también lo notarán, cuando prepares esas delicias veganas que nadie podrá creer que son veganas también lo notarán – ¡y con la boca abierta! – y tal vez te pidan la receta para probar y te harán preguntas y ahí tienes otra oportunidad de hablar sobre por qué eres vegano. 

Finalmente, te digo que abraces con orgullo el hecho de ser vegano. Recuerda siempre que estarás abriendo corazones porque solo las personas dispuestas a ver más allá de lo que siempre nos han mostrado y enfrentar la injusticias son las que han cambiado el mundo y las que siempre lo cambiarán.

¡Comparte esta nota!