Preparación

Precalienta el horno a 180ºC o 300ºF.

Cierne la harina, la cocoa y los polvos para hornear en el mismo recipiente.

Vierte el aceite de coco derretido, la vainilla y comienza a amasar hasta lograr una masa homogénea.

Separa la masa en 20 bolitas, coloca esas bolitas sobre una charola para horno con papel encerado o previamente engrasada.

Con ayuda de un tenedor aplana, yo lo hago dos veces en sentido contrario, pero tú puedes darles la forma que desees.

Hornea durante 20 min a 180ºC o 300ºF.

Sácalas y estarán blanditas aún, solo debes dejar que enfríen completamente para obtener unas galletas firmes y crocantes.

Espolvorea un poco de azúcar glass para decorar. Si no las compartes todas guárdalas en un refractario para galletas. Te durarán frescas hasta 20 días.