¿Qué es la zoonosis? Son enfermedades infecciosas que se transmiten entre animales y humanos, es una preocupación creciente en la salud pública global. Estas enfermedades, que pueden ser causadas por virus, bacterias, parásitos y hongos, representan una amenaza significativa debido a su capacidad de propagarse rápidamente entre especies. 

Como si no fuera suficiente el daño que la ganadería industrial causa a los animales y al medioambiente, sus prácticas también tienen consecuencias devastadoras para la salud mundial. Las enfermedades zoonóticas tan peligrosas, capaces de paralizar a la humanidad, son el resultado de nuestra mala relación con los animales y nuestra insana relación con la comida y el origen de esta. 

La celebración del Día Internacional de la Zoonosis, el 6 de julio, busca aumentar la conciencia sobre estos riesgos y promover la colaboración entre profesionales de la salud humana, animal y ambiental, pero nosotros tenemos el interés de que te sumes en tus decisiones cotidianas.

Una de las principales áreas de preocupación en la transmisión de zoonosis es la ganadería industrial. Las prácticas de hacinamiento de animales para la producción masiva de carne crean un entorno propicio para la propagación de enfermedades. En estas condiciones, el estrés y la falta de higiene debilitan los sistemas inmunológicos de los animales, facilitando la aparición y transmisión de patógenos.

Ejemplos recientes destacan los peligros de estas prácticas. El brote de gripe porcina (H1N1) en 2009, que se originó en granjas de cerdos, causó una pandemia global que resultó en millones de infecciones humanas y numerosas muertes. Asimismo, la gripe aviar (H5N1 y H7N9) ha mostrado repetidos brotes vinculados a la avicultura intensiva, poniendo en riesgo no solo a los trabajadores de granjas, sino también a la población general.

Enfermedades que se generan dentro de la ganadería industrial y que se transmiten a las personas incluyen:

Originada en granjas de cerdos, se propagó a nivel global causando millones de infecciones humanas.

Brotes recurrentes vinculados a la avicultura intensiva, con altas tasas de mortalidad en humanos.

Común en productos avícolas, provoca infecciones gastrointestinales en humanos.

Transmitida a través del consumo de carne de aves contaminada, causa infecciones intestinales severas.

Contagio a través de productos lácteos no pasteurizados de animales infectados, afecta múltiples sistemas en humanos.

Frecuente en carne de res contaminada, puede causar infecciones graves y potencialmente mortales.

Transmitida por productos lácteos y cárnicos mal procesados, afecta especialmente a personas con sistemas inmunológicos debilitados.

El caso más reciente y devastador ha sido la pandemia de COVID-19, causada por el coronavirus SARS-CoV-2. Aunque se sospecha que el virus se originó en un mercado de animales vivos en Wuhan, China, el evento subraya cómo las malas prácticas de manejo de animales, junto con la interferencia humana en la vida silvestre, pueden desencadenar crisis de salud global.

Estas enfermedades no solo causan sufrimiento humano, sino que también tienen profundos impactos económicos y sociales. La prevención y el control de las zoonosis requieren un enfoque integral que considere la salud de los animales, los humanos y el medio ambiente como interdependientes..

En este contexto, transicionar hacia una alimentación basada en plantas no solo puede mejorar nuestra salud, sino también la del planeta. Al reducir nuestra dependencia a los productos que provienen de la ganadería industrial, podemos disminuir el riesgo de zoonosis y contribuir a la creación de un mundo más ético y sostenible.

Cada elección alimentaria que hacemos tiene el poder de marcar una diferencia. Optar por una alimentación rica en vegetales, frutas, legumbres, granos y semillas es un acto de compasión y responsabilidad que beneficia tanto a nuestra salud como al bienestar de los animales y el medio ambiente. Juntos, podemos construir un futuro más saludable y armonioso para todos los seres vivos.