Queso Tipo Roquefort Vegano
Me llena de alegría compartir contigo este queso roquefort vegano, pensado para acompañar tus fiestas, celebraciones y encuentros especiales. Es una preparación con carácter, aroma profundo y una presencia que roba miradas en la mesa, pero que, a diferencia de su versión tradicional, nace desde la compasión.
Cada porción representa una elección consciente: una forma de disfrutar sin causar sufrimiento, de celebrar sin que ningún animal sea explotado o separado de su familia. Al optar por esta versión vegetal, no solo llevas a tu mesa un alimento delicioso, accesible y nutritivo, también contribuyes a transformar realidades y a demostrar que el placer y la ética pueden ir de la mano.
Este queso es una invitación a compartir, a cuidar y a recordar que incluso los pequeños cambios en lo que comemos pueden tener un impacto profundo en la vida de los animales y en el mundo que queremos construir.
Tiempo de preparación: 90 minutosIngredientes
(400 g )
Para la base
- 1 taza de semilla de girasol
- 1 taza de leche de soya (sin endulzar)
- 1/4 de taza de maicena
- 2 cdas. de levadura nutricional
- 3 cdas. de vinagre de manzana
- 1 cda. de ajo en polvo
- 1 cda. de cebolla en polvo
- 1/2 cda. de sal
- 4 cdas de aceite de coco deshodorizado o manteca vegetal
Para las artes oscuras
- 1/2 taza de ajonjolí negro
- 1/2 taza de leche de soya (sin endulzar)
- 1/2 cdas. de levadura nutricional
- 1 cda. de vinagre de manzana
- 1 cda. de maicena
- 1 cdita. de ajo en polvo
- 1 cdita. de cebolla en polvo
- 1/2 cdita. de sal
- 1 cda. de aceite de coco deshodorizado o manteca vegetal
Preparación
Comienza remojando las semillas de girasol y las semillas de calabaza en agua caliente durante dos horas, hasta que estén suaves. Pasado este tiempo, el proceso es el mismo para ambas preparaciones: licúa por separado todos los ingredientes de cada mezcla hasta obtener cremas lisas y homogéneas. Reserva.
En un recipiente o refractario, de preferencia cuadrado, vierte una capa de la mezcla blanca como base. Añade una pequeña cantidad de la mezcla oscura y, con ayuda de un palillo, traza líneas o figuras delicadas. Es importante no mezclar ambas preparaciones; el efecto debe ser sutil, imitando las vetas características del queso tipo roquefort.
Continúa agregando más mezcla blanca y repite el proceso, siempre con moderación en la mezcla oscura.
Una vez formado el queso, coloca el recipiente en una vaporera con un litro de agua previamente caliente y cocina a fuego medio durante cuarenta minutos. Al terminar, deja enfriar por completo y refrigera por al menos tres horas antes de desmoldar, cortar y disfrutar.
¡Monta en una tabla para quesos y disfrútalos con pan o galletas!